Uno de los relieves románicos de Turégano representa a Santiago el Mayor, mientras que el otro muestra un pantocrátor sobre unas figuras de peregrinos. Además, aparecen otras que podrían corresponder a un rey, a una reina y a un obispo. Los estudios realizados indican que estas figuras podrían estar relacionadas con la consagración de la catedral de Santiago de Compostela, en 1211.
También han aparecido restos de pinturas sobre los sillares, entre las que destacan unas de tipo geométrico y la figura de un ángel, así como una decoración imitando el llagueado de la sillería con trazos rojos y brotes vegetales en la bóveda.
También han aparecido restos de pinturas sobre los sillares, entre las que destacan unas de tipo geométrico y la figura de un ángel, así como una decoración imitando el llagueado de la sillería con trazos rojos y brotes vegetales en la bóveda.